jueves, 24 de mayo de 2012

La Bulimia y la Anorexia







La bulimia y la anorexia son, entre otros, trastornos de la alimentación que han cobrado un marcado interés en nuestra sociedad en los últimos años, a pesar de ser enfermedades de larga data, y que se reactivan, especialmente, cuando empieza a asomar el verano y es hora de ponerse los trajes de baño.

INTRODUCCIÓN

Etimológicamente significa "hambre de nada", es decir, que la persona anoréxica tiene hambre como requerimiento puramente fisiológico, pero no "desea" comer, no tiene apetito.
La manifestación de esta enfermedad se ve en la "rebeldía de no comer", que representa un llamado de atención para los padres y amigos de la persona enferma.
Así encontramos a las personas enfermas, cuyo porcentaje más alto es de mujeres -a pesar que la enfermedad sigue avanzando en el terreno de los varones- con un peso muy bajo, a veces hasta en un 85 % por debajo del peso deseable, índice del "terror" que sienten de engordar y convertirse en obesas.
Entre algunos de los síntomas que generalmente encontramos en la anorexia (abdómenes hundidos, brazos y piernas esqueléticas), amenorrea (pérdida y desorden de los ciclos menstruales), bradicardia (disminución del ritmo cardíaco), hipercolesterolemia (nivel de colesterol muy alto: 280 - 300), insuficiencia cardíaca y comúnmente esta es la causa de muerte en la anorexia a través del paro cardíaco.

DEFINICIÓN
En los últimos diez años el incremento del número de afectados por anorexia ha sido galopante. En la actualidad, en los países desarrollados, la anorexia nerviosa afecta aproximadamente a una de cada 200 jóvenes de entre 12 y 14 años y aunque las mujeres jóvenes (chicas entre 14 y 18 años) siguen siendo el colectivo más afectado, los varones, las mujeres maduras y los niños/as menores de 12 años comienzan a sumarse a la lista de víctimas de esta afección.
La anorexia nerviosa es más frecuente en la mujer que en el varón en una proporción de 10 a 1. La bulimia se da con más frecuencia que la anorexia nerviosa, su incidencia es 4 veces mayor. Los estudios plantean que entre el 3 y el 10% de las chicas la padecen. Entre el 50 y el 60% de los casos se cura y el resto de pacientes cronifican la enfermedad.

EPIDEMIOLOGIA
Sexo: La anorexia nerviosa se manifiesta ligada al sexo femenino de una manera rotunda, hay unanimidad en todos los trabajos al considerar que el 90-95% son mujeres. En la tabla 3 se recogen aquellos estudios sobre una población superior a 100 individuos donde queda manifiesta la preponderancia del sexo femenino en esta patología.
Nivel socioeconómico:  Más tarde se observó que si bien hasta 1975 el 70.6% de las pacientes anoréxicas pertenecían a las clases altas a partir de esa fecha se reducían al 52%. Se considera que los cambios de distribuicion de la enfermedad hay que atribuirlo a las actitudes de los adolescentes, independientemente de la clase social, hacia la comida, la sexualidad, la imagen corporal y el peso. El nivel de exigencia y la disponibilidad de alimentos son similares entre los miembros de diferentes clases.
Educación: La mayoría de los autores y de forma unánime consideran que las pacientes anoréxicas son muchachas con un buen rendimiento intelectual, que tienen éxito en sus estudios y que por pertenecer a clases medias y altas pueden desarrollar estas capacidades; estas características unidas a la autoexigencia, perfeccionismo y deseo de agradar a los demás se interpreta habitualmente como un marco adecuado donde desarrollar el trastorno.
La población joven de estas sociedades occidentales tiene muchos puntos en común: programas educativos similares e intereses culturales comunes: moda, música,cine etc., que les hace por un igual susceptibles frente a la presión cultural de los estereotipos culturales, "la cultura de la delgadez y el éxito a través de una figura atractiva".


DIAGNOSTICO Y CRITERIOS CLÍNICOS
Las alteraciones conductuales de la Anorexia Nerviosa se inician cuando las pacientes comienzan su dieta restrictiva, en muchas ocasiones es difícil para los familiares delimitar el punto exacto en que la paciente pasa de una dieta moderadamente baja en calorías a otra francamente hipocalórica.
La progresiva restricción alimentaria despierta la alarma de la familia, la paciente intenta mantener oculta la conducta de rechazo a la comida utilizando diferentes subterfugios, dice que no tiene apetito, o que ya ha comido a otras horas. En realidad, malcome a solas, tira la comida, la esconde o simplemente se enfrenta a la familia manteniendo tercamente su escasa dieta.
 Se vomita después de comer a escondidas, y de no poder hacerlo en el lavabo se guardan los vómitos en cualquier rincón, esperando la ocasión propicia para deshacerse de ellos.
Otra conducta peligrosa por parte de las anoréxicas es la utilización de diuréticos, ya sea por las alteraciones de la dieta, por la hipoproteinemia o por los problemas circulatorios algunas anoréxicas pueden presentar edemas, que combaten con diuréticos, la mala utilización de estos fármacos provoca graves trastornos electrolíticos.
 Es decir, están alterados los siguientes aspectos
* Conducta alimentaria
* Hiperactividad
* Comportamiento familiar
* Conducta social
* Respuesta conductual a la psicopatología
Es preciso abrir los ojos ante ciertos comportamientos como:
•Hacer deporte en exceso y tener preferencia por los alimentos light.
•Tener un estado de ánimo triste con grandes cambios de humor y aislarse continuamente.
•En relación con los alimentos: hacen trozos pequeños, los esparcen por el plato, revuelven la comida, la secan con servilletas para evitar todo tipo de grasa.
•Padecen estreñimiento debido a su escasa dieta y tiene dificultades para dormir bien.


MODIFICACIONES DE CONDUCTA
 La aparición de estas enfermedades relacionadas con la alimentación se dan especialmente en la adolescencia, entre los 14 y los 20 años, ya que es una etapa en la que el cuerpo se está desarrollando y cambiando abruptamente y la imagen mental que tenemos del propio cuerpo es más lenta que su evolución biológica.
La responsabilidad de un adolescente enfermo recaiga sobre la publicidad y los medios, que muestran modelos perfectos del hombre y la mujer, delgados y bellos, o sobre la misma familia, pero lo cierto es que ambos núcleos sustentan, por así decirlo, la evolución que realiza la enfermedad en un adolescente en plena formación física y psíquica, y son a la vez quienes pueden ir erradicando la enfermedad de quienes la padecen y de la sociedad toda.


¿POR QUÉ SE DA, EN GENERAL, EN LA ADOLESCENCIA?
La televisión, el cine, las revistas, la publicidad, tienden a identificar éxito, belleza y aceptación social con cuerpos delgados e inducen a muchos adolescentes con problemas de inseguridad o confianza a obsesionarse por conseguir ese cuerpo escuálido que se nos vende como modelo de perfección.
En los países desarrollados, el 80% de las mujeres ha estado alguna vez a dieta; y es que en la sociedad moderna continuamente nos están bombardeando con la idea de que la delgadez es moda; que con un cuerpo esbelto obtendremos éxito.
No hay que olvidar que mantenerse en forma combinando deporte con una dieta sana y equilibrada es incluso beneficioso, pero lo que debemos impedir es que la delgadez se convierta en una obsesión que nos lleve a enfermar, o a la anorexia o a la bulimia.
Las claves para prevenir estas enfermedades son:
•Que la publicidad y el estereotipo que se nos propone no menoscabe la seguridad en nosotros mismos.
•Consultar con un especialista antes de iniciar una dieta; sobre todo si se está en fase de crecimiento.
•Acudir al médico en cuanto se empiece a detectar una pérdida desproporcionada de peso.
•Solicitar ayuda psicológica para el enfermo y la familia.
•Comiendo sano y haciendo ejercicio de forma adecuada, permitirás a tu cuerpo mantenerse en el peso que necesita.
•Aprender a gustarte tal y como eres te ayudará a aceptar tu "peso natural".